miércoles, 21 de julio de 2010

Continuidad y participación

Rosa María Horta
RUNBO

Para lograr tener una ciudad ideal existen dos fuerzas que se necesitan para lograrlo:

Primero " la continuidad" de acciones de nuestros gobernantes y segundo "la participación" responsable como ciudadanos.

Te invito a participar en este espacio, hablemos sobre la acción de nuestros gobernantes y platiquemos sobre formas de participación, cómo invitar a nuestros vecinos y comprometernos, con la meta de lograr una ciudad en que podamos vivir seguros.

La ciudad ideal

Alberto Benabib
Colonos Lomas Anáhuac

¿Se podrá lograr la ciudad ideal?

¿Va el desarrollo, hacia la ciudad ideal?

¿En caso de crear la ciudad ideal, esta podría permanecer o como debe transformarse??

Si queremos definir la ciudad ideal, debemos primero entender por qué surge la ciudad. El motivo principal es la conveniencia de utilizar un espacio que tiene ciertas características y que por diferentes circunstancias se van estableciendo un grupo de individuos, que llegará a ser muy numerosos, que se desarrollan y van desarrollando diferentes actividades, en las que buscan satisfacer no solo necesidades básicas, sino de educación, esparcimiento, producción, comercio, servicios, espiritual, entre otras.

¿Podremos, acaso, imaginar que la ciudad ideal podría tener algo de las ciudades que conocemos con todos sus excesos y vicios en su desarrollo y operación? Abrimos este espacio para el intercambio de ideas. ¿Qué opina?

miércoles, 14 de julio de 2010

Devolver al peatón su señorío

Archibaldo Hope
Salvo Lomas


La ciudad esta constituída por los edificios, el espacio público que queda entre estos y la gente que la puebla.

Se origina para satisfacer una necesidad de protección mutua y continúa su desarrollo como el lugar de interacción, donde vecinos y forasteros hacen sus intercambios comerciales y culturales y donde sucede la vida social de los vecinos, donde conviven y desempeñan sus actividades cotidianas.

Es un lugar para las personas, y alrededor de las personas debe darse su desarrollo; el automóvil es una herramienta útil y conveniente, creada por el hombre pero de prioridad inferior, por tanto no debe ser el centro del desarrollo urbano.

La ciudad debe ser amable, vibrante, interesante y tener vitalidad económica, debe ofrecer a las personas, calles y lugares atractivos donde convivan todos los actores urbanos, donde el espacio y las vivencias individuales se compartan, donde se interactúe y conviva, donde se conozcan e intercambien experiencias y vivencias las personas.

En los pasados 100 años, desde que irrumpió en la escena urbana, el automóvil ha usurpado el espacio público que ya existía y ha demandado con una avidez insostenible más y más espacio para poder funcionar de una manera mas o menos util.

Ha causado la destrucción de areas de las ciudades y de enormes superficies de terrenos agrícolas y areas naturales, para acomodar su demanda de más y más calles, en las cuales más y más gente se ha podido transladar y fincar más y más casas cada día más y más lejanas del lugar de sus actividades -trabajo, educación, diversión-, que ocupan más y más superficies de labranza o áreas naturales que son devastadas por el desarrollo urbano expansivo, cada vez más alejado, y congestionando las calles que permitieron llegar hasta ahi, en primer lugar, por lo que se exige la construcción de aun más calles, creándose así un círculo vicioso sin solución.

Esa preponderancia del automóvil en la vida urbana actual debe ser limitada y contrarrestada para devolver al peaton su señorio sobre la ciudad.